Deidades en el Antiguo Egipto - Bastis
Bastis (Bast)
Los gatos eran muy importantes para los antiguos egipcios e incluso se los consideraba semideidades. No solo protegían los cultivos y hacían más lenta la propagación de las enfermedades matando roedores, sino que también se pensaba que eran la forma física de la diosa Bastet. Bastet era la diosa de la protección, el placer y la portadora de una buena salud. Tenía la cabeza de un gato y un delgado cuerpo femenino.
Bastet era hija de Ra, hermana de Sejmet, esposa de Ptah y madre de Maahes. Desde la Segunda Dinastía, Bastet fue adorada como una deidad, más comúnmente en el Bajo Egipto. Su forma y poderes cambiaron a lo largo de los años.
Se creía que todos los días cabalgaba por el cielo con su padre, el dios del sol Ra. Mientras su bote era tirado por el sol a través del cielo, ella lo cuidaba y protegía. Por la noche, ella se convertía en un gato para proteger a Ra de su mayor enemigo, la serpiente Apep.
Debido a sus deberes de protección, fue apodada la Dama del Este, la Diosa del Sol Naciente, y el Ojo Sagrado y que Todo lo Ve. También es conocida como la Diosa de la Luna y se pensaba que era el ojo de la luna y el ojo de Ra. A Bastet todavía se le rinde culto hoy en día, y algunos creen que su protección recae sobre los gatos modernos.
Imagen: RC 1574, 2243 y 96 Imágines votivas de Bastet en el Museo Egipcio Rosacruz.